viernes, 23 de marzo de 2012

ESTAS DESPEDIDO!!!

Como una despedida de soltero se convirtió en un viaje "cultural":
Antes que se creen rumores falsos, tengo que entrar al trapo con redoble de tambor y pluma de tinta roja.
Me dirigía a la despedida de soltero de Alex, después de una semana con cuatro aeropuertos en mi trasero blanco. Llegando a Madrid, me dijeron que había  un cambio de planes, que en lugar de hacer una ruta enóloga en Ribera del Duero, habían decidido en el último momento, ¡ir a Amsterdam! Estaba asombrado y eso que me gusta mucho el vino. Alex  contó que hizo una promesa a un amigo imaginario: Hacer un viaje por los canales de Amsterdam, tomaríamos té con pastas y visitaríamos la casa de Anna Frank. -Chicos, -nos dijo- os he comprado unos sombreros  vaqueros! Empezó a sonar la canción de " What is love"http://www.youtube.com/watch?v=DvB3_WfrnzU". Chemudo casi se desnuda, pero  lo paramos a tiempo. Al llegar al aeropuerto de Amsterdam  nos encontramos un vaquero de verdad, con su hebilla y sus botas de Cowboy, con el gesto de agitar abajo arriba el sombrero como reverencia. ¡Fue la señal En ese momento sabía que el mojo me acompañaba y encontraría material para mi Blog de una forma natural.
Llegamos al Gran Hotel Hostal, con muchas estrellas, gente increíble, cercana, ¡unos Paquistanís de la ostia!
Nos dimos una vuelta por los canales de Amsterdam, visitando todo tipo de museos, comiendo manjares en kebabs de corner, mientras yo comía vegetariano y no era el nabo de Alex,¡ mal pensados! Era una despedida cultural, ya lo he dicho, ¿por qué me insistís?
Verdejo, empezó a darme golpecitos en el hombro, las costillas, estaba juguetón, cogió confianza muy rápido.  Juan Marcos y Chemudo, durmieron juntos, dos noches. Yo no digo nada,  sólo doy imágenes. 
Caminaba con mis Reebok de Pump clásicas, que les tenía mucho aprecio y muchos kms. Debido a unos eventos no controlados, la zapatilla se mojó, no se secó bien y nació un nuevo ecosistema + ocho kms  andados en ese día, llegue a la habitación y el presagio era cierto, en ese momento me acorde del Cowboy. Mis zapatillas olían a ácido corrosivo que se clavaba en el cerebro, una mezcla del tugurio que dormí en Vilnius + Roquefort. Mis neuronas pese al olor, actuaron rápido y deje las zapatillas escondidas a 10 cm de la almohada de Alex, su cama estaba junto a la ventana y las largas cortinas de seda negra tapaban la repisa donde las escondí. Ellas cumplieron su papel: Vengarme de Alex* Seguidamente me fui a duchar, cuando comencé a escuchar: Buahhhgghghhh,¡ pero qué asco! Jo...lines!, Chema, ¡saca tus zapatillas! Desde la ducha me imaginaba a Alex con la cara de color gamba, había entrado en un juego que solo tendría un final.  Escuche fuertes risas y sonidos extraños durante más de dos minutos y cuando salí, Guille me contó que Alex había vomitado por el "olor" de las zapatillas.  Alex me sonreía con un amargor en el corazón, en el fondo sabía que le había ganado, ¡touche!  Me compre unas zapatillas nuevas y deje las Rebook de Pump ambientando el pasillo del Hostal.

P.D: Juan Marcos propuso visitar un café con tienda, pero no tuvimos tiempo.
P.D: Chemudo, se quito las gafas de sol cuando llegamos a Madrid.
P.D: Verdejo, me llamaba Shema, yo le decía que es con Ch.
P.D: Alex, quiso salir del armario, pero nadie lo acompañó.
P.D: Guille, se quedó en Amsterdam.
*Somos amigos desde los 11 años, me acuerdo que con 12 años me pego una patada intencionada, Alex, ¿ahora quien ríe?

                                                      Mi amigo Alex, muy contento!

Vermejo, me pinto las uñas mientras dormía, para que le hiciera un trabajo "manual".

                                           Mis nuevas bambas.

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